en este momento imagino o sé que el campo está plateado y el aire limpio balancea los tallos de innumerables especies vegetales que nunca llegaré a comprender como viven simplemente las liebres en sus cuevas y los topos debajo de la tierra en túneles inexplicables para la obsesión humana que todo lo quiere sin polvillo ni olores acres las vacas suculentas paradas en la misma dirección todas como si supieran de un extraño Feng Shui, muy cerca de un arroyo con su sonido de agua entre las piedras y terreno arcilla donde tantas veces caminé buscando una mítica Boca al mar y el agua del mar enriquecida en la mezcla llena de peces gordos y fríos los bichos muy cerca de las flores y las flores cerradas esperando el sol calmas latiendo con las semillas que inexplicablemente buscarán lo que necesiten sin esfuerzo si el tiempo acompaña sólo el dueño del campo estará preocupado por el clima y sus avatares y la verdad, lo entiendo.