Hace unos años la saturación del paisaje urbano de colores primarios dañaban mi retina como si me expusiera al sahara desnuda y sin camello para llegar pronto al oasis y la carpa. Araceli Gonzales en ropa interior y los calzoncillos Eyelit en toda la carteleria me daban el mismo efecto que los arbolitos llenos de borlas y la compulsión por los piononos navideños. La risa mecánica y la música alta, profusa y penetrante en los bondis y autos tuneados, tranforma la vida en una publicidad eterna, donde ni siquiera los chicos de verdad se sienten a gusto. Desde el 21 de setiembre hasta el 21 de abril la vida es un zamba. Antes decía, esto no es real (aunque me quedaran las crocs de goma adheridas al asfalto imposible de la urbe). Porque los monotributistas nos tenemos que vestir y trabajar toda la temporada primavera verano.. No estoy en contra de los festejos estoy en contra de convertime en un extra a la fuerza en una película Del sabor del encuentro ( para servir los panchos claro)a la fuerza.. Formo parte del segmento que la única publicidad acorde sería la de Activia: como convatir el tránsito lento con Georgina que siempre le pone onda.
El capítulo de las dietas y los gimnasios por suerte no me incluyen. Ya he comunicado que no seré extra de ningún emprendimiento de tamaña envergadura. Vivan los michelines. Además, válgame deus, con cuarenta grados te da ganas de comer hojas y agua.
lo inevitable: equinoccio te guste o no
debería salir corriendo a comprar ropa liviana. renovar mi calzado. y comprar un montón de flores o al menos la idea de las flores en la mente para poner un poco de color a mi vida. Pero qué estoy diciendo si ya tengo color suficiente. Los kilos acumulados en el invierno quieren salir al aire también. Es un derecho humano la desnudez sin culpa. me estoy preparando con hidalguía no ya para la primavera sino para el verano en que el cuerpo todo toma aire como las hojas de los árboles que a la mañana abren los estomas y liberan lágrimas de emoción. en verdad es el calor y por ósmosis, las plantas transpiran. Primavera oh madurez divino tesoro, por suerte sigo contando el cuento. Yo ya estoy mas allá de los picnic y los besuqueos culposos. La madurez tiene la ventaja de que nadie, excepto tu hija te miraría con sorna, si te mirara, claro.
Tengo que decir con la paz que me dieron los años de pensarme con cierto distanciamiento antropológico, que ya nada de lo que viene de afuera me afecta mucho más que lo que viene de adentro. y lo que viene de adentro dice: otra primavera y este año viene con muchas flores, frutos, plantas perennes, piñas, piñones, aviones que te llevan a ver paisajes con relieve. ¿será eso la felicidad? la famosa frase de mi viejo: hacer de tu culo un pito y del pito una trompeta..... Mamá que estas diciendo..... nada hija, es la fiebre trasnochada.
Tengo la convicción de que si quiero me tomo el palo a conocer Tierra del Fuego y nada podría impedírmelo. si hasta tengo puntos. en fin, la vida es por ósmosis. bienvenidos los colores primarios, las esporas y los tilos. Esta primavera creo que el calor no va a molestarme. se terminaron los veranos como iguana.
soy algo liviano llevado por los vientos. o los vientos pueden sostenerme. con lo que me gusta volar.
que los poros respiren y se llenen de aire así vuelo de una vez y parafraseando a mi viejo, nada de pitos ni trompetas, alitas.
El capítulo de las dietas y los gimnasios por suerte no me incluyen. Ya he comunicado que no seré extra de ningún emprendimiento de tamaña envergadura. Vivan los michelines. Además, válgame deus, con cuarenta grados te da ganas de comer hojas y agua.
lo inevitable: equinoccio te guste o no
debería salir corriendo a comprar ropa liviana. renovar mi calzado. y comprar un montón de flores o al menos la idea de las flores en la mente para poner un poco de color a mi vida. Pero qué estoy diciendo si ya tengo color suficiente. Los kilos acumulados en el invierno quieren salir al aire también. Es un derecho humano la desnudez sin culpa. me estoy preparando con hidalguía no ya para la primavera sino para el verano en que el cuerpo todo toma aire como las hojas de los árboles que a la mañana abren los estomas y liberan lágrimas de emoción. en verdad es el calor y por ósmosis, las plantas transpiran. Primavera oh madurez divino tesoro, por suerte sigo contando el cuento. Yo ya estoy mas allá de los picnic y los besuqueos culposos. La madurez tiene la ventaja de que nadie, excepto tu hija te miraría con sorna, si te mirara, claro.
Tengo que decir con la paz que me dieron los años de pensarme con cierto distanciamiento antropológico, que ya nada de lo que viene de afuera me afecta mucho más que lo que viene de adentro. y lo que viene de adentro dice: otra primavera y este año viene con muchas flores, frutos, plantas perennes, piñas, piñones, aviones que te llevan a ver paisajes con relieve. ¿será eso la felicidad? la famosa frase de mi viejo: hacer de tu culo un pito y del pito una trompeta..... Mamá que estas diciendo..... nada hija, es la fiebre trasnochada.
Tengo la convicción de que si quiero me tomo el palo a conocer Tierra del Fuego y nada podría impedírmelo. si hasta tengo puntos. en fin, la vida es por ósmosis. bienvenidos los colores primarios, las esporas y los tilos. Esta primavera creo que el calor no va a molestarme. se terminaron los veranos como iguana.
soy algo liviano llevado por los vientos. o los vientos pueden sostenerme. con lo que me gusta volar.
que los poros respiren y se llenen de aire así vuelo de una vez y parafraseando a mi viejo, nada de pitos ni trompetas, alitas.
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